FELICITACIONES A LAS DIFERENTES COMISIONES POR UNA EXCELENTE LABOR CUMPLIDA...

viernes, 1 de febrero de 2013

BASES DE LA EPISTEMOLOGÍA A COMIENZOS DEL SIGLO XXI



MSc. Miriam Karina Caro
MSc. Edwar Ramírez
MSc. Juan Carlos Pérez

La investigación científica es  concebida como un proceso intencional y sistemático de producción del saber y de conocimientos, resultado de la actividad científica, dentro de un enfoque epistemológico admitido.

No basta con comprar bibliografía y tecnologías computacionales para estar a la par o competir con los grandes centros del saber. Es necesaria una formación epistemológica constante que abra las mentes creativas de nuestros estudiantes e investigadores. Para los que reconocemos la realidad del mundo en el siglo XXI, los días que vivimos en peligro, no es precisamente el título de una película sino el encabezado de los titulares de los periódicos de nuestro planeta día a día. Peligro medioambiental, peligro de guerra, peligro de caos social, animales en peligro de extinción, peligro de extinción del ser humano. Todo esto parece exageración dirían los que no gustan de las malas noticias. Y sin embargo, estamos frente a un escenario posible aunque no deseable, el que estemos al borde de una crisis planetaria.

El uso de la herramienta epistemológica permite obtener una ventaja competitiva; aun en nuestras tierras, prácticamente condenadas al consumo y a la acumulación del saber. Esta aplicación permite ubicar nuestros centros de estudios universitarios en un rango tan importante como los existentes en los países desarrollados. Es un propósito viable que exige apoyo de los administradores y gerentes de la educación universitaria para poder alcanzar este propósito de autodeterminación y complemento al desarrollo mundial de la ciencia.

La globalización es transdisciplinaria, por lo tanto, necesita análisis del mismo corte y desde miradas no parceladas por la hiperespecialización. Si analizamos tanto el concepto de transdisciplinariedad como el ilimitado rango de temas que se abordan bajo la mirada de la globalización, nos podemos dar cuenta de la aseveración anterior.


El principio de la acción estrategia es pues aplicable tanto al análisis de la realidad del sistema internacional y la globalización, como al análisis de los discursos y su coherencia en las acciones. La realidad cambia constantemente y no nos hemos preparado para ella, la velocidad a la que dichos cambios se dan se ha acelerado a partir de las revoluciones científico-técnicas que permiten que las identidades, las realidades, los discursos y los procesos se vuelvan más complejos. Por lo tanto, las propuestas para la realidad deben de apegarse a acciones estrategias incluyentes.
El auge de la ciencia se debe al hecho de que se le considera una variable estratégica para el desarrollo de las sociedades. En particular en Venezuela, se le ha dado un impulso a la investigación científica y a sus productos, concretados en los libros, monografías, artículos científicos, revistas arbitradas, congresos, reuniones, así como los organismos e instituciones que la apoyan y financian como el Ministerio de la Ciencia y la Tecnología. En la modernidad, la ciencia pasó de un período absolutista hegemónico a otro período relativista. En el primer período se identifica la ciencia como el único saber verdadero y el más importante, respecto a la filosofía, el arte, la religión, el sentido común. Mientras que en el segundo período, el relativista, se reconocen los límites de la ciencia en cuanto al carácter aproximado que resultan todas las explicaciones teóricas o empíricas.

Este círculo le da carácter humano a la actividad de investigación científica, con intención primaria cognoscitivo y que puede variar desde la obtención propia del conocimiento hasta su uso para la solución de problemas y la generación de tecnologías según sea el caso o la intención de la investigación. Este carácter humano le confiere a la investigación una nueva connotación de científico - tecnológico y asume desde allí su carácter socio - histórico, ya que ha devenido como una estrategia para la superación de la pobreza y el atraso social tal como señala Tûnnerman (2000) "el subdesarrollo científico - tecnológico es a la vez causa y consecuencia del subdesarrollo económico social " pero sin menoscabo, acoto, con lo planteado por Martin Fiorino sobre la ética de la ciencia.
Cuando insistimos en la importancia estratégica de la epistemología en la formación del investigador lo hacemos porque se trata de producir un conocimiento competitivo y de calidad. Competitivo en el sentido de poder estar la investigación a la altura de cualquier centro de investigación a nivel mundial. Esto a la luz de nuevos avances epistemológicos queda muy atrás y por lo tanto el estudio queda desactualizado, a pesar de haber aplicado muy bien, una determinada teoría, un método o un procedimiento, dentro de los parámetros seleccionados. . Señala Bunge, que "Si la sustancia (objeto) no puede ser lo distintivo de toda la ciencia, entonces tiene que serlo la forma (el procedimiento)" (Bunge. 1983: 22). Inmediatamente especifica que "la peculiaridad de la ciencia tiene que consistir en el modo como opera para alcanzar algún objetivo determinado, en otros términos, en el método científico y en la finalidad para la cual se aplica dicho método

De esta manera, el problema principal que enfrenta actualmente la investigación y su metodología tiene un fondo esencialmente epistemológico, pues gira en torno al concepto de conocimiento y de ciencia y la respetabilidad científica de sus productos: el conocimiento de la verdad y de las leyes de la naturaleza. De aquí, la aparición, sobre todo en la segunda parte del siglo XX, de las corrientes posmodernistas, las postestructuralistas, el construccionismo, la Teoría crítica, el análisis del discurso en general, los planteamientos que formula la Teoría del conocimiento. El enfoque sistémico es indispensable cuando tratamos con estructuras dinámicas o sistemas que no se componen de elementos homogéneos y, por lo tanto, no se le pueden aplicar las cuatro leyes que constituyen nuestra matemática actual sin desnaturalizarlos, la ley aditiva de elementos, la conmutativa, la asociativa y la distributiva de los mismos, pues, en realidad, no son “elementos homogéneos”, ni agregados, ni “partes”, sino constituyentes de una entidad superior; las realidades sistémicas se componen de elementos o constituyentes heterogéneos y son lo que son por su posición o por la función que desempeñan en la estructura o sistema total; es más, el buen o mal funcionamiento de un elemento repercute o compromete el funcionamiento de todo el sistema: ejemplos de ello los tenemos en todos los seres vivos y aun en la tecnología, como el estrepitoso fracaso del Challenger o del Ariane V, debidos, respectivamente, a una superficie exterior no cuidada o a los “tiempos” de una computadora. En general, podríamos señalar, como una especie de referente clave, que la matemática trabaja bien con objetos constituidos por elementos homogéneos y pierde su capacidad de aplicación en la medida en que estos son de naturaleza heterogénea, donde entra en acción lo cualitativo y sus relaciones.
            En los últimos tiempos, se han ido dando las condiciones necesarias y suficientes para que todo investigador serio y de reflexión profunda, pueda, a través de las bibliotecas, las revistas y los congresos, subirse sobre los hombros de docenas de pensadores eminentes, le es posible divisar grandes coincidencias de ideas y marcadas líneas  de un nuevo modo de pensar, de una nueva manera de mirar las cosas, de una nueva racionalidad científica y, en síntesis, de una nueva ciencia. Esta ciencia presenta notables diferencias con el modo de pensar tradicional, clásico, lógico-positivista.
            La complejidad de las nuevas realidades emergentes durante el siglo XX, su fuerte interdependencia y sus interacciones ocultas, por una parte, y, por la otra, el descubrimiento de la riqueza y dotación insospechada de la capacidad creadora y de los procesos cognitivos del cerebro humano, postulan una nueva conciencia y un paradigma de la racionalidad acorde con ambos grupos de realidades.
No se trata de desechar los conocimientos que hemos ido acumulando a lo largo de los siglos por cualquiera de las vías metodológicas por las cuales se hayan logrado, sino de reorganizarlos y reestructurarlos para darles mayor sentido y vigencia. Por lo tanto, cada disciplina deberá hacer una revisión, una reformulación o una redefinición de sus propias estructuras lógicas individuales, que fueron establecidas aislada e independientemente del sistema total con que interactúan, ya que sus conclusiones, en la medida en que hayan cortado los lazos de interconexión con el sistema global de que forman parte, serán parcial o totalmente inconsistentes.
            Ahora se trata de integrar nuestros conocimientos en el Paradigma Sistémico, pues, como dice Ludwig von Bertalanffy, "desde el átomo hasta la galaxia vivimos en un mundo de sistemas" (1981, p. 47); y esto, desde lo inconmensurablemente grande hasta lo infinitesimalmente pequeño, pasando por nuestro mismo organismo, donde todos son sistemas y sistemas de sistemas, y donde toda investigación digna de ese nombre consiste en determinar el rol o papel que juega cada parte en el conjunto del todo a que pertenece, y donde su buen o mal funcionamiento compromete positiva o negativamente el todo en que está inserta y del cual forma parte. La aplicación de la epistemología al interior de la producción del conocimiento permite auto- reflexionar y auto evaluar el desarrollo de la ciencia. Es decir, permite reconocer los avances y los obstáculos que se van presentando en la investigación.

1 comentario:

  1. INFORME ARGUMENTATIVO SOBRE LAS BASES DE LA EPISTEMOLOGÍA A COMIENZOS DEL SIGLO XXI

    Humberto Peña C.I.N° 11.980.974
    Oscar Aponte C.I.N° 6.556.958

    En el articulo analizado pudimos constatar que es de reciente data el estudio profundo y serio de la epistemología; no obstante se ha hecho imperioso y obligado una transformación radical de estos conceptos; viendo que la mayoría de los autores, filósofos, tratadistas y estudiosos de este modelo se han sentido insatisfechos por el estudio que hasta ahora se ha hecho; demandando reemplazar este viejo modelo por uno nuevo que diese cabida a la realidad del mundo en que vivimos, mundo este controvertido, inconsistente, incoherente, real y sobre todo dinámico, lo que hace que no exista una solución única para los problemas económicos, políticos y sociales porque el nivel de complejidad del mundo cada día es mayor, no pudiendo las esferas del conocimiento existentes encontrar respuestas sin crear nuevas ideas, nuevas teorías, nuevos procesos innovando cada día en todas las áreas debiendo hacer una redefinición de su esencia o estructura.
    Se hace necesario para esta nueva epistemología considerar ciertos aspectos como: una calificada preparación de sus profesionales, una visión transnacional en todos los aspectos, el dialogo como método imprescindible e impedir el parcelamiento del saber, o sea, un enfoque global. Así mismo debemos tener un nuevo enfoque científico eliminando el modelo reduccionista, o sea, no ver las partes de manera aislada ya que sería insostenible ver estas variables de forma independientes o dependientes; debemos buscar el conocimiento a través de un proceso mental creando modelos y porque no también teorías, igualmente los términos de complejidad y transdisciplinariedad debemos manejarlos relacionándolos con la epistemología para que con una experiencia de campo o vivencial sea la vía de adquirir el autentico conocimiento, o sea, el contacto con la realidad, la parte sensorial del ser humano que al fin y al cabo determina la verdadera realidad.
    Por último se hace una reflexión que no podemos comprender el todo sin ver sus partes, pero podemos ver las partes sin comprender el todo, se habla de la lógica dialéctica de Hegel 1966 y sus postulados, también del aporte de la neurociencia que hace una conexión de manera global entre los factores físicos, biológicos, psicológicos, sociales y ambientales constituyendo un nuevo paradigma, se habla del conocimiento como realidad emergente, se repiensa la ciencia para que en los últimos 50 años como sucede hoy en día el investigador serio pueda a través de bibliotecas, revistas, congresos e internet constituir un nuevo modo de pensar basándose en las nuevas realidades, en la objetividad y en las transformaciones en todos los niveles.
    Para nuestro concepto el desafío que tenemos por delante es el cambio y adaptarnos a ese nuevo cambio que nos impone la realidad del siglo XXI.

    ResponderEliminar